Durante las primeras 24-48 horas, el paciente puede sentir alguna ligera molestia o la aparición de pequeños hematomas en la zona tratada. Efectos secundarios habituales en cualquier cirugía estética que irán desapareciendo a lo largo de los días y siempre que se sigan las pautas y recomendaciones médicas.
Es necesario guardar reposo relativo durante los próximos días tras la intervención. La primera semana se mantendrá el drenaje y, dependiendo de las necesidades del paciente, se podrá ampliar más días hasta retirarlos por complejo.
Tras finalizar la intervención, al paciente se le colocará una faja médica quirúrgica que tendrá que llevar, al menos, unas tres semanas. El uso de esta faja post quirúrgica permite reducir al máximo la inflamación de la zona, reducir el posible sangrado, hacer presión en la piel y, por supuesto, evitar la aparición de seromas.
En Clínicas Dorsia acompañamos este tratamiento de eliminación de grasa con técnica Vaser con sesiones personalizadas de aparatología. A partir de la segunda semana se comienzan con las sesiones de presoterapia, una vez por semana, y los masajes drenantes, dos veces a la semana.
Se recomienda evitar que la zona tratada se exponga al sol las primeras semanas, al igual que fumar y beber alcohol.