Altas, delgadas y caras de ensueño, así son las Mises latinas (y las del resto del mundo). La peculiaridad en el caso de las Mises latinoamericanas es el culto a la belleza que se vive en países como Colombia, Venezuela o Puerto Rico desde la cuna.
Las niñas latinas participan en certámenes de belleza que comienzan en los primeros cursos del colegio y se suceden a lo largo de la niñez hasta la adolescencia convirtiéndose en una forma de vida.
Es cierto que la genética es muy generosa en los países latinos, pieles doradas sin rastro de imperfecciones, caderas anchas y cinturas estrechas que le dan a sus cuerpos esa estética curvilínea tan deseada, pero los genes no hacen todo el trabajo.
En estos países los tratamientos médico-estéticos y la cirugía estética están generalizados, de hecho, Colombia y Venezuela son países pioneros en el modelado corporal mediante la cirugía y este es uno de los secretos mejor guardado de las mises latinoamericanas.
Entre las cirugías más comunes destacan:
Rinoplastia: En los países latinos la nariz racial suele ser chata y ancha, por lo que la rinoplastia es una excelente opción para afinar los rasgos y lograr un perfil mucho más armónico.
Mentoplastia y extracción de las bolas de Bichat: El rostro más común entre las mujeres latinas es redondeado y con pómulo marcado. En este tipo de rostro lo que se busca es afinar el tercio inferior mediante la mentoplastia y la eliminación de tejido graso.
Aumento de pecho: El tipo de cuerpo más extendido en Latinoamérica es el que tiene forma de pera, este se caracteriza por la tendencia a acumular grasa en muslos, glúteos, caderas y abdomen bajo, siendo la parte superior del cuerpo mucho más atlética, carente de grasa y, por lo tanto, con pechos más pequeños. El aumento de senos es la cirugía más demandada en países como Venezuela y Colombia.
Liposucción Vaser de Alta Definición: La Lipo Vaser es la joya de la corona para las Mises latinas. Esta liposucción con ultrasonido es mucho menos agresiva con los tejidos que la liposucción convencional, al no necesitar el empleo de la fuerza ni tanta fricción en la maniobra de succión de la grasa. Al ser mucho más delicada se puede emplear en zonas más superficiales y con menos tejido graso como el abdomen, los oblicuos e incluso en zonas pequeñas y de difícil acceso como los tobillos. La capacidad de eliminación de esta técnica es tan eficaz que consigue resultados atléticos y de alta definición sobre todo en el abdomen logrando que el marcaje abdominal ya no sea exclusivo del gimnasio. La grasa extraída luego es reutilizable mediante la técnica de lipofilling muy útil para aumento de glúteos y rellenos faciales.
Estos son algunos de los truquitos de muchas reinas de belleza latinoamericanas que, gracias a la cirugía estética logran las proporciones ideales y ese último toque de definición que es tan difícil de lograr solo con dieta y ejercicio.
