¿Cómo perder los kilos que hemos engordado en verano?. Es la pregunta del millón y la que todos nos hacemos. Nos queremos dejarte con la incógnita y vamos a responderla. Durante las vacaciones de verano incrementamos la vida social, las comidas y las cenas con la familia y los amigos se multiplican.
Estas alteraciones en las rutinas alimentarias provocan un aumento de peso que oscila entre los 2 y los 3 kilos. Aunque, es habitual que la mayoría experimentemos un aumento de peso, hay personas que consiguen mantenerse, y otros pueden engordar hasta 5 kilos durante el período vacacional.
Si has decido recuperar la silueta que tenías antes de las vacaciones, vas a necesitar unos 30 días para conseguirlo. Es más fácil acumular la grasa que eliminarla, pues nuestro cuerpo tiene unos mecanismos que le ayudan a ahorrar energía. El organismo almacena grasa (mecanismo de defensa) y en el caso de que se produzca un déficit, recurre a la reserva. Cuando se reduce la ingesta de calorías, el cuerpo recurre a estas reservas para garantizar que todo funcione.
Cómo perder los kilos que hemos engordado
Todos conocemos los hábitos saludables, aunque a veces, se nos olvidan. No existen fórmulas mágicas que nos ayuden a perder peso, pero sí que hay pequeños gestos que nos permiten lograrlo:
1. No dejar de Comer. Al dejar de alimentarnos lo único que vamos a conseguir es el efecto contrario. Lo adecuado es realizar varias comidas, de eso modo se evitan los «picoteos» y que en la siguiente comida, se coma más de lo necesario.
2. Realizar actividad física de forma regular. Con actividades moderadas como andar, se consumen entre 1’5 y 4’9 calorías por minuto. Un paseo en bici, que es una ejercicio medio, se consumen entre 3’5 y 7’4 calorías por minuto. Salir a correr, que es un ejercicio más intenso, se llegan a consumir hasta 10 calorías por minuto. Para alcanzar tu objetivo, debes realizar 30 minutos de deporte al día.
3. No todas las grasas son malas. Hay que desterrar esta idea, pues con la grasas monoinsaturadas y las polinsaturadas nos ayudan a equilibrar el nivel de grasa en el cuerpo. Es importante, que en nuestra dieta se incluyan alimentos ricos en ácidos grasos como el omega-3 u omega-6 (aceites vegetales, pescado azul, moluscos u crustáceos)
4. Beber agua en abundancia. Para favorecer la eliminación de toxinas hay que beber entre 1’5 y 2 litros al día.
5 Organízate. Elabora un pequeño plan semanal con las comidas y cenas. Si comes en el trabajo, prepara tus platos el día anterior, de ese modo evitarás la tentación de comer cosas menos sanas.
MINERVA, EL CAMINO HACIA UNA VIDA MÁS SANA
Bajar de peso es un reto que con frecuencia nos planteamos. La obesidad y el sobrepeso se han convertido en la epidemia del siglo XXI. Según la OMS (Organización Mundial de la Salud) «en el mundo, cada año mueren 2’8 millones de personas a causa de la obesidad y el sobrepeso».
En Dorsia somos conscientes de que nos es sencillo cambiar de hábitos, y para ayudar a todas las personas que padecen estos problemas alimentarios hemos creado Minerva, una unidad especializada en nutrición y obesidad.
Cuando una paciente llega a la clínica, el equipo médico estudia en profundidad su caso. Con una simple dieta se puede bajar de peso, pero no se ataca el problema de raíz. Nuestro equipo, busca el origen del problema y elabora un plan personalizado.
Nuestros pacientes no están solos en este camino. Durante todo el tratamiento van a contar con el apoyo de un equipo multidisciplinario (médico, cirujanos, nutricionistas, psicólogos …) que les guiaran durante todo el proceso.
Nuestro objetivo es que cada paciente logre su objetivo y que adquiera las claves para que su vida sea más saludable y no vuelva a recuperar el peso perdido.
TODO CAMBIO EMPIEZA CON UNA ACCIÓN
